Ministro de Defensa de la Federación Rusa, Sergei Shoigu
Buenas tardes, queridos colegas. Manos a la obra.
Comenzaré con el estado de los acontecimientos en la zona de la operación militar especial.
Nuestras fuerzas armadas continúan bombardeando e infligiendo daño al enemigo, lo que reduce significativamente su potencial ofensivo.
Sólo en el sur de Donetsk y Zaporozhye, donde las formaciones ucranianas están llevando a cabo ataques fallidos, grupos de las Fuerzas Armadas Rusas destruyeron 15 aviones, 3 helicópteros, 920 vehículos blindados, incluidos 16 tanques Leopard. Esto supone casi el 100x100 de los tanques de este tipo suministrados por Polonia y Portugal.
En total, desde el 4 de junio, las tropas ucranianas han perdido alrededor de 2.500 piezas de diverso armamento pesado en el campo de batalla. También, durante el mes pasado, las unidades de defensa aérea rusas interceptaron 158 cohetes HIMARS, 25 Misiles Storm Shadow de crucero y 386 vehículos aéreos no tripulados. En general, el enemigo no logró sus objetivos en ninguno de los frentes, lo que atestigua la habilidad de nuestros combatientes y las expectativas, claramente infladas, depositadas en las cacareadas armas occidentales.
Independientemente de tan significativas pérdidas, el mando ucraniano, ante la insistencia de los patrocinadores occidentales, requiere a las Fuerzas Armadas de Ucrania que continúen la ofensiva.
Al mismo tiempo, Kiev trata de compensar su incapacidad para asegurar el éxito en el campo de batalla a través de ataques terroristas contra objetivos civiles y lograr así un efecto propagandístico. Gracias a la profesional actuación de nuestro personal militar, hemos logrado minimizar las pérdidas entre la población civil y salvar cientos de vidas.
No podemos dejar de abordar una cuestión más, a la que nuestro Comandante en Jefe ya ha dado cumplida respuesta. Nos referimos al intento del 23 al 25 de junio destinado a desestabilizar la situación en Rusia. Estos planes fracasaron, principalmente porque el personal de las Fuerzas Armadas se mantuvo leal al juramento y a su deber militar. La provocación no afectó las acciones de nuestras tropas. Valerosos y altruistas, nuestros militares han continuado resolviendo las tareas asignadas.
Doy las gracias al personal por su concienzudo servicio.
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