MONCADA – 25/07/2021
La guerra de cuarta generación lanzada contra Cuba por el gobierno de Estados Unidos y los anexionistas de origen cubano residentes en el Estado de La Florida, está siendo ganada por los patriotas que no desean que la Perla de las Antillas pierda su independencia y su soberanía, ganadas el primero de Enero de 1959.
Y la implacable ofensiva imperialista ha dado lugar a manifestaciones y acciones solidarias desde los propios Estados Unidos y el resto del mundo, y a declaraciones como las del presidente de México, Manuel López Obrador, quien aseguró que Cuba, por su resistencia de 62 años al imperio, merecía el Premio de la Dignidad y el reconocimiento como Patrimonio de la Humanidad.
Luego de los acontecimientos del domingo 11 de julio, cuando desde una empresa de Miami se lanzaron hacia Cuba centenares de miles de mensajes, mediante robots, para alentar las protestas en varias ciudades cubanas, aprovechando la difícil coyuntura económica, los efectos de la pandemia y otros hechos coyunturales provocados por el cruel bloqueo económico, comercial y financiero de Estados Unidos, el cual fracasó estrepitosamente por la digna respuesta del pueblo y el gobierno cubanos, el ataque ha estado dirigido a cuestionar el sistema jurídico cubano.
Y ahí también la Revolución ha salido victoriosa pues en su campaña sobre desaparecidos en Cuba, excesos de la policía frente a los manifestantes, y detenidos sin garantías procesales, la respuesta muy profesional de funcionarios del Ministerio del Interior, los tribunales y la Fiscalía, ha sido muy sólida, y ha permitido recordar que la única cárcel en la que se violan de manera flagrante los derechos humanos de los detenidos está en la ilegal Base Militar de Estados Unidos en la provincia cubana de Guantánamo, establecida hace más de un siglo y que se mantiene contra la voluntad del pueblo y el gobierno cubanos.
Cuba, es firmante y cumple con los postulados de la Convención Internacional para la protección de todas las personas, contra las desapariciones forzadas, y la Convención contra la tortura y otros tratos o penas crueles, inhumanas o degradantes.
Los enemigos de Cuba no esperaban está sólida respuesta de los funcionarios de la Fiscalía General de la República, los Tribunales y el Ministerio del Interior.
Tratan de desconocer el artículo 51 de la Constitución cubana, aprobada por la inmensa mayoría del pueblo, que establece con toda claridad que las personas en Cuba no pueden ser sometidas a la desaparición forzada, tortura o penas crueles, inhumanas o degradantes.
Poco a poco va prevaleciendo la verdad de los acontecimientos en Cuba, una pequeña nación cuya existencia constituye una espina atravesada en la garganta del imperio, y así lo reconoce el mundo.
Un país que lleva 29 años presentando ante la ONU una resolución contra el criminal e ilegal bloqueo de Estados Unidos, que el pasado 23 de junio fue apoyada por 184 naciones del mundo, con la solitaria oposición de Washington y de su incondicional aliado Israel.
Para la administración de Joe Biden, que en seis meses de mandato no ha cumplido sus promesas de revertir las crueles medidas adoptadas por Donald Trump de recrudecimiento del bloqueo contra Cuba, la situación se torna difícil, por cuanto muchos de los congresistas de su partido, la mayoría de la emigración cubana y periódicos como el New York Times, le exigen levantar un bloqueo que afecta no solamente a Cuba, sino al mundo, y a los propios ciudadanos estadounidenses.
La pequeña Cuba, en medio de esta guerra de cuarta generación, sabe muy bien distinguir entre los intereses imperialistas y de los anexionistas, y los verdaderos intereses del pueblo de los Estados Unidos, que dio héroes de la grandeza del joven Henry Reeve, quien entregó su vida por la causa de la independencia de Cuba.
La Habana, 26 de julio de 2021
Sesenta años de bloqueo criminal a Cuba por parte del Imperio. Con esto está todo dicho. Lo que hay que exigir es el fin del bloqueo y dejar a Cuba en paz. Pero no; sigue la manipulación, la guerra sucia, la desinformación y la legión de gente que se traga todo lo que los medios de adoctrinamiento les vomite.
ResponderEliminarSalud!
Así es, Ángel. El aparato de propaganda capitalista, ese sí que es tóxico.
EliminarSalud!
Ha quedado sobradamente acreditada la mano de US en las pasadas protestas de Cuba, pero mucha gente no sabe, no puede o no lo quiere entender. Holy crap! It’s so god damn annoying.
ResponderEliminarLa CIA (Cabrones Intervencionistas Amorales). Creen que los únicos americanos son ellos y que el continente, desde Alaska hasta el Cabo de Hornos, les pertenece. Fuck them!
EliminarAquí dejo un texto del catedrático de comunicación Francisco Sierra, que nos ilustra sobre ‘La batalla de las ideas’ de la que habló Fidel y sobre el papel que juegan las supuestas organizaciones humanitarias financiadas por EEUU. Me llama la atención la valoración que hace Sierra –no estoy seguro pero creo que militante del PCE–, de George Soros, al que el líder comunista de IU y dirigente del PCE considera un ‘Filántropo humanista”. Manda cojones.
ResponderEliminar“ (…) Como desde el siglo XIX, Estados Unidos utiliza tanto la presión bilateral a los países o instituciones que se han prestado históricamente a sus designios como formas de intervención y agresión militar en la continua ocupación de lo que considera su patio trasero, empezando a tal fin por el estrangulamiento de fondos internacionales de cooperación y continuando con el sabotaje y la financiación de la contra de ONGs.
Sobre ellas ya advirtió el politólogo James Petras en la medida que constituyen el frente cultural de la guerra ideológica, como venimos observando desde las operaciones de paz de la administración Clinton. La intervención por razones humanitarias sea en Kosovo o como ahora se propone en Cuba es un clásico del discurso de la injerencia imperialista. Así, hoy de nuevo, como en Venezuela, la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID); la Fundación para la Nueva Democracia (NED), creada en 1983 por Reagan para sustituir a la CIA en la organización de acciones «no armadas» en los tiempos de la Contra; Freedom House o la Open Society de George Soros financian, forman, coordinan y dan sostenimiento a la supuesta «sociedad civil» que quieren democratizar, imaginamos que como en Colombia, el país. (…) ”
(Francisco Sierra)
Recomiendo visitar el muy interesante blog de Francisco Sierra:
https://www.franciscosierracaballero.net/sobre-mi/
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Todas esas... agencias, diría yo, han tenido un protagonismo muy destacado en los altercados de Hong-Kong y, desde luego, en Ucrania. Pero no cabe duda de que las directrices de todas ellas, por "blandas" que sean, parten de Langley.
ResponderEliminarCuando la depredadora oligarquía ofrece bondadosamente ayuda humanitaria, es momento de preparase para lo peor, te regalan calcetines y te roban los zapatos.
Ya mismo voy a visitar ese blog que nos recomiendas.
Gracias por la aportación.
En su artículo 'Información y pandemia. Apuntes marxistas para una comunicología posible y necesaria' Francisco Sierra cita a Eugenio Trías, umm... alguien que, digámoslo así, no es muy de tu agrado. Lo sé por propia experiencia.
EliminarTienes toda la razón Loam, Eugenio Trías no es un intelectual de mi agrado, y no lo es porque pertenece a esa casta de charlatanes chaqueteros que tanto abunda por aquí. Y en su caso, lo mismo se pegó al pesebre del PSUC, del PSC o del partido de Pujol. Oportunismo político-estomacal que no quita que en algún momento haya podido escribir algo que nos pueda interesar, cosa que ignoro. Y supongo que Francisco Sierra sí ha encontrado algo digno de citar, aunque me parece que en este artículo concreto es pura anécdota de la que no creo que se pueda sacar ninguna conclusión. Ya digo, una gota en el océano de esta auténtica ‘Casa de citas’.
EliminarHaciendo un somero repaso constato que Sierra también cita a Marx (con diferencia el autor más citado en el artículo), Raymond Williams, Bolívar Echeverría, Enrique Dussel, Gramsci, Habermas, Adorno, Deleuze, Castoriadis, Oskar Negt, Ulrich Beck, Mattelart, Goebbels, Dovifat, Lippmann, Ignacio Ramonet, André Vitalis, Orwell, Clausewitz, N. Klein, Milton Friedman, Agamben, Pierre Lévy, Herbert Marcuse, Hernández Busto, Subirats, David Cronenberg, Zizek… en fin, toda una fauna variopinta de pensadores muy dispares e incluso antagónicos entre sí pero que Sierra ha estimado conveniente juntar en esa verdadera olla podrida que es su texto.
Lo importante, pienso yo, no es a quién citas sino en qué sentido y con qué propósito lo citas. En definitiva se trata de espigar de aquí y de allá, como nos muestra la cineasta Agnés Varda en su obra maestra: “Los espigadores y la espigadora”.
Lenin citaba elogiosamente al primer Plejanov, que fue su maestro e introductor al marxismo, y más tarde lo repudió cuando éste abandonó las filas revolucionarias y abrazó el reformismo burgués. Exactamente lo mismo hizo con el renegado Kautsky. Se puede citar elogiosamente a Rosa Luxemburgo como revolucionaria intachable en la teoría y en la práctica, pero no podemos olvidar ni dejar de criticar su recalcitrante incomprensión del nacionalismo y del derecho a la autodeterminación. Hegel fue políticamente un reaccionario y un filósofo idealista, pero su dialéctica puesta del revés permitió a Marx, que lo criticó más que nadie, desarrollar el análisis dialéctico y el materialismo histórico. Y no quiero aburrir más, aunque sobran los ejemplos. No nos queda otra que espigar, pero es claro que debemos de hacerlo con criterio, con el criterio de nuestra conciencia de clase. Ah, y también debemos hacerlo con economía, porque si nos dejamos llevar por los numerosos ‘señuelos’ que Sierra (y otros muchos ‘citadores’) nos muestra en su artículo…
Salud
Algunos de los que citas deben ser posmodernos —según la mordaz, y acertada, definición de Terry Eagleton en su escrito Las ilusiones del posmodernismo.
Eliminar“Se puede aventurar, en una primera y cruda aproximación, que gran parte del posmodernismo es políticamente opositor pero económicamente cómplice.”
Excelente escrito cuya lectura, por cierto, tú mismo me sugeriste y a cuyo autor conocí gracias a dicha sugerencia. (EL OTRO ha sido, al menos para mí, un destacado lugar de referencia y una rica y fiable fuente de información. En fin... que todavía lamento su súbita desaparición).
Estoy de acuerdo contigo, no hay que demorarse más de lo imprescindible en esos detalles de citas, dimes y diretes.
Gracias por tu valiosa aportación.
Salud y comunismo.
Como en tantos lugares, cuando USA suelta a sus guarimbas estas no se ven apoyadas en el interno, tampoco en el externo y acaban muriendo después de unos días. EL ruido mediático es usado más fuera que dentro del país, como sucede con los disturbios en Venezuela aprobechados por la derecha en España, Colombia, Brasil o Argentina. Guarimbas y Guaidós sin apoyo social más que un destello de enfado.
ResponderEliminarSalud!
Cierto, pero hacen mucho daño. En realidad, Guaidó ha sido un eficaz instrumento para que el Banco de Inglaterra se apropie (robe) el oro de Venezuela en él depositado.
EliminarSalud!