17 septiembre, 2021

Falleció Alfonso Sastre, dramaturgo, poeta y militante revolucionario

Alfonso Sastre


La Haine – 17/09/2021


En su trayectoria intelectual y militante se caracterizó por su compromiso político, contra la dictadura franquista y con la izquierda abertzale, independentista y socialista


Alfonso Sastre ha fallecido a los 95 años en Hondarribia, donde ha residido todos estos últimos años. Nació en Madrid el 20 de febrero de 1926, y allí desarrolló desde su juventud una intensa actividad literaria, con preeminencia de obras de teatro. En ambos campos, igual que en la poesía y la narrativa, late una profunda inquietud social y política, de indudable orientación izquierdista, que desarrolló en Euskal Herria, el Estado español y América Latina, que en el contexto de la época se convierte inevitablemente en protesta antifranquista.


Sin embargo, ha sido en Euskal Herria donde se asentó definitivamente y desarrolló toda su calidad humana y su compromiso político, convirtiéndose en una referencia de lucha por la independecia y en una voz que nunca calló ante la injusticia.


El autor de obras como 'La taberna fantástica' recibió el Premio Nacional de Teatro en 1986 por su importante contribución al género.


Sastre estaba considerado uno de los principales exponentes de la denominada «Generación del 50» y durante su larga trayectoria intelectual y militante se caracterizó por su compromiso político, contra la dictadura franquista y con la izquierda abertzale, independentista y socialista.


La noticia la ha hecho pública Abotsanitz, la formación de la izquierda abertzale de Hondarribia con la que ha colaborado en estos últimos años Sastre.


Eva Forest y sus primeros pasos


«Hasta siempre, amigos. Hasta todos los días que vengan a partir de ahora a estos territorios de angustia y de esperanza. Allí estaremos. Ahí nos encontraremos siempre, en las nuevas batallas por la emergencia de un nuevo mundo. Este es el campo de la praxis; aunque hoy yo me encuentro más bien en el de los poetas que exclamaron: ‘¡Hay golpes en la vida tan fuertes! ¡Yo no sé!’ o ‘y el hombre, ¡pobre!, ¡pobre!’ (César Vallejo), o: ‘un empujón brutal te ha derribado!’ (Miguel Hernández), o ‘¡Qué dignos de piedad son los hombres!’ (Strindberg, El sueño). Etcétera. Dejemos esto, camaradas. Vamos a continuar nuestra lucha, y que al Dios de la Biblia y a esa mierda de Némesis le den definitivamente por culo, aunque nosotros perezcamos -ya estamos pereciendo, porque Dios nos hizo, como Sartre escribió, mortales- siendo así, ese cabrón de Dios (recordad Las moscas,) el primer asesino de la historia».


Son palabras de Alfonso Sastre, pronunciadas a la muerte de su compañera, Eva Forest, en 2007. Desde la lucidez y la sabiduría, Alfonso, que a su vez nos ha dejado ahora, añadía estas palabras: «Hace ya un montón de años que estoy presentando en mis escritos la vida humana como un complejo de praxis y agonía, y no voy a extrañarme ahora de estar viviendo un momento agónico. ¡A ver si es que se va a morir todo el mundo menos nosotros! Hoy, el aluvión de los testimonios de solidaridad y de dolor en que vivimos me impide abrazaros a todas las gentes que desde distintos niveles de intimidad y de fraternidad nos estáis enviando las palabras de vuestro corazón. Aquí tengo desde testimonios de amigos de toda mi vida, que lloran conmigo, con nosotros, hasta la voz de nuestros últimos compañeros del pueblo vasco en el que hemos sido muy felices».


Con el grupo ‘Arte Nuevo’, que cofundó en 1945, Sastre da a la luz sus primeros trabajos para el teatro. Su primer gran éxito es ‘Escuadra hacia la muerte’, drama en dos actos estrenado el 18 de marzo de 1953, prohibido por el franquismo a la tercera representación e interpretado por el Teatro Popular Universitario, donde un grupo de soldados se encuentra castigado en una Tercera Guerra Mundial y se subleva.


En 1953 Sastre ya ha concluido sus estudios de Filosofía y Letras. Las prohibiciones llegarán una tras otra, pero Alfonso no flaquea y continúa produciendo una obra de denuncia de la dictadura. A finales de los 50 incursiona en el mundo del cine, con guiones para José María Forqué y Juan Antonio Bardem.


Viaje a Cuba


La sangre y la ceniza’ se escribe entre 1962 y 1965 y se edita en italiano y francés antes que en castellano (1976). ‘La taberna fantástica’ (1968, pero estrenada el 23 de septiembre de 1985) trata, con apariencia de sainete, el tema del lumpen y la marginalidad.


En 1971 Sastre escribe ‘Askatasuna!’ y un año después viaja a Cuba y Cagliari, donde se representan sus obras, que también fueron editadas dos años más tarde en francés. De aquella época proviene su compromiso inquebrantable por la revolución cubana, que se ha mantenido en el tiempo.


En pleno franquismo, Sastre sostuvo una notoria polémica con Antonio Buero Vallejo sobre el modo de luchar con el teatro para cambiar la sociedad durante la dictadura; mientras que Buero defendía el posibilismo, es decir, aprovechar cualquier resquicio que permitiera la férrea censura franquista para intentar cambiarla desde dentro, Sastre consideraba que esta actitud era una claudicación y optó por un teatro radical que apenas encontró forma de poderse representar, debido a la presión de la censura y las dificultades que ponían los empresarios teatrales.


En 1978 terminó la ‘Tragicomedia fantástica de la gitana Celestina’, publicada en italiano en 1979 y en español en 1982. ‘El viaje infinito de Sancho Panza’ (1984) reelabora las dos partes de Don Quijote: Sancho intentó ahorcarse al morir su amo; ha ingresado en un manicomio, cuyo siniestro Doctor narra cómo convenció a don Quijote para buscar aventuras por los campos de La Mancha. Escribe ‘Jenofa Juncal, la roja gitana del monte Jaizkibel’ y ‘Los últimos días de Emmanuel Kant contados por Ernesto Teodoro Amadeo Hoffmann’, estrenada ésta última en febrero de 1990. En 1997 escribió 'Alfonso Sastre se suicida' y en 2001 'Drama titulado No'. En 1993 recibió el Premio Nacional de Literatura en la modalidad de Literatura Dramática.


En cuanto a narrativa y poesía, en el primer campo cuenta, por citar sólo algunas de sus obras, con ‘El Paralelo 38’ (1964), ‘Las noches lúgubres’ (1963), ‘El lugar del crimen’ (1982), o ‘Historias de California’, publicada ya en Hondarribia en 1986 por medio de la editorial Hiru, que fundara junto a su compañera Eva. En poesía, deben citarse ‘Balada de la cárcel de Carabanchel y otros poemas celulares’ (París, 1976), ‘El Evangelio de Drácula’ (1976), ‘El español al alcance de todos’ (1978), ‘Vida del hombre invisible contada por él mismo’ (1994), y ‘Obra lírica y doméstica’.


Actividad política


No se puede trazar la figura de Alfonso Sastre limitándose a su obra dramática y literaria. Su otra cara, indivisible como el anverso y el reverso de una mano, la constituye su incansable actividad política de izquierda e independentista.


Durante el franquismo, Sastre militó el Partido Comunista de España, que abandonaría a principios de la década de los 70 por su deriva reformista. En 1956 fue encarcelado por su participación en las protestas universitarias contra la dictadura. Durante los últimos años de la dictadura, Eva fue detenida el 16 de septiembre de 1974 por su presunta implicación en el atentado de la calle Correo, que dejó doce muertos. Tras ser encarcelada, Sastre se presentó en el juzgado, siendo encarcelado y procesado. Pasó ocho meses y medio en prisión antes de ser puesto en libertad provisional, y finalmente la causa fue sobreseída. En 1975 se estableció en Burdeos, donde permaneció año y medio, antes de ser expulsado por las autoridades francesas.


Tras la puesta en libertad de Eva, que permaneció en prisión preventiva tres años, hasta que fue excarcelada en junio de 1977 y definitivamente exonerada gracias a la Ley de Amnistía de dicho año, la pareja se instaló en Hondarribia, donde la familia ha vivido desde entonces. Desde su establecimiento en Euskal Herria, la actividad política de Alfonso y Eva se desarrolló en el marco de la izquierda abertzale, no sin sobresaltos, como la detención que sufrieron en 1980 acusados de dar refugio a un comando de ETA.


Izquierda abertzale


Alfonso se implicó a fondo en la izquierda revolucionaria, hasta el punto de que en las elecciones al Parlamento Europeo de 1994 fue candidato por Herri Batasuna, promotor y candidato de Euskal Herritarrok (EH) para las elecciones al Parlamento de Gasteiz por Gipuzkoa en 1998, y en 1999 lo fue para las elecciones al Parlamento Europeo. También fue uno de los firmantes de apoyo a una iniciativa a favor de los derechos de los presos vascos en 2000 y autor en 2002, junto con Eva, de un documento contra la ilegalización de Batasuna.


Igualmente fue promotor de la candidatura Herritarren Zerrenda (anulada por los tribunales neofranquistas españoles) para las elecciones al Parlamento Europeo de 2004. En 2008 fue candidato por ANV en las elecciones generales al Senado, candidatura que igualmente anuló el Tribunal Supremo. Por último, en las elecciones al Parlamento Europeo de 2009 fue cabeza de lista de la candidatura Iniciativa Internacionalista.


Su impronta ha permanecido y su legado nunca morirá.


11 comentarios:

  1. Descansa en paz (nosotros, no).

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  2. Una gran pérdida. Salud, Loam!

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    1. Así es, Conrado. No obstante, nos deja su obra y una estela de lucha y coherencia.

      Salud!

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  3. Tuve el privilegio de estrechar la mano de Alfonso Sastre allá por el año 1977 o 1976, no recuerdo bien. Fue con motivo de un homenaje que el desaparecido PTE, con el camarada Julio Vélez a la cabeza, le organizó en Madrid, en el antiguo hotel Victoria sito en la Plaza de Santa Ana. La esperpéntica anécdota que marcó el acto fue que un tal Nazario Aguado, dirigente ‘de los de cartel del PTE’, le llamó en su torpe e improvisado discursito, ‘Alfonso Paso’. Las carcajadas, incluidas las de Sastre, llegaron y rebotaron en la fachada del edificio situado al otro lado de la plaza, el Teatro Español, como no podía ser de otra manera. En fin, más de cuarenta años después rindo mi pequeño homenaje al gran Alfonso Sastre, recomendando la lectura de una obra, “Lumpen, marginación y jerigonza”, extraordinaria en todos los sentidos. Que ustedes la disfruten.

    Salud y comunismo

    *

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    1. Cuántos y cuán diversos recuerdos acuden a mi memoria con la sola mención de la Plaza de Santa Ana, y aunque entre dichos recuerdos no figura el privilegio de haber estrechado la mano de Alfonso Sastre, bueno es saber que tú lo hiciste. Me uno a tu homenaje a esta extraordinaria persona.

      Salud y comunismo. ☭

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  4. LA BATALLA DE LOS INTELECTUALES O NUEVO DISCURSO DE LAS ARMAS Y LAS LETRAS
    Alfonso Sastre

    Descarga gratis aquí:
    http://biblioteca.clacso.edu.ar/clacso/se/20100604034038/sastre.pdf

    *

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    1. Descargado. Destaco y cito del prólogo:

      "Sastre además nos advierte de “lo peligroso que puede ser un micrófono en las manos de un cretino, cuando el tal cretino goza de total impunidad”, así como ese curioso fenómeno de la “intrepidez de la ignorancia”, tan común en los medios que, supuestamente, educan a los ciudadanos de una democracia (p. 57). Estas tertulias, naturalmente, nada tienen que ver con al auténtico debate de ideas, con los “contrastes de opiniones razonadas” tan infrecuentes en nuestros días y casi extinguidas por completo en los grandes medios de comunicación."

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  5. La Batalla de los Intelectuales, uno de cuyos pasajes reproduzco a continuación

    “Veamos: ciertamente la población bienpensante antes era ‘de

    Derechas’ (o la gente de derechas era la bienpensante); y hoy la

    “gente de izquierdas” es bienpensante (o la gente bienpensante

    resulta ser –o así se presenta– de izquierdas, que de ambas formas

    puede decirse). Por mi parte, yo reivindico para mí una posición no

    bienpensante y así lo propongo para una izquierda deseable y seriamente

    radical, aunque ello resulte paradójico. Mi modo de ‘pensar

    bien’ es ‘pensar mal’; lo que creo que me sitúa –ay– en el refranero

    castellano, en el que se certifica que ‘pensar mal’ es una vía segura

    para el acierto. Pero la idea que ha prosperado socialmente es que

    ‘pensar bien’ es lo propio de los intelectuales, aunque ese pensar

    bien los sitúe en el en otro tiempo desdeñado mundo de la gente

    bienpensante.” (La Batalla de los Intelectuales, p. 91.)

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    1. Completamente de acuerdo con Sastre.
      https://arrezafe.blogspot.com/2021/06/piensa-mal-loam.html

      "Piensa mal. Ahora, piensa peor aún.

      Retuércelo hasta que parezca mentira.

      Añádele una forzada vuelta de tuerca más.

      Toma la conclusión y estruja los pormenores.

      Cuando llegues a lo inaudito,

      vuelve a pensar mal,

      vuelve a retorcerlo,

      añádele toda la maldad imaginable.


      Te has quedado corto."

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    2. "Hoy, cuando ellos recuerdan lo que fue su pasado, acusan como un crimen común el atentado al Almirante Carrero Blanco –olvidando las risas ante los chistes populares y acaso el champán que ellos mismos bebieron en aquella ocasión–, o bien, miran benévolamente su pasado “izquierdista” como un signo de falta de madurez muy propio de la juventud. En cuanto a mí, recuerdo que yo estaba más cerca de quienes se manchaban las manos, a veces de sangre, a veces incluso de mierda, por referirme a una expresión de Jean Paul Sartre en su drama Las manos sucias."

      Cita extraída de 'La batalla de los intelectuales'.

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