Artículo completo en Voltairenet.org – 28/04/2022
La propaganda de la OTAN trata de restar importancia a los neonazis ucranianos comparándolos con los grupúsculos neonazis existentes en el resto de Occidente. Pero la realidad es que los "banderistas" ucranianos han venido incrustándose en el poder durante los últimos 30 años, imponiendo su versión de la historia, inculcando sus ideas a la juventud y modificando poco a poco todos los símbolos del Estado. Han adoctrinado a una tercera parte de la población ucraniana y ya son al menos un tercio de los efectivos de las fuerzas armadas. Como objetivo se plantean destruir Rusia y para ello están teniendo la ayuda de los "straussianos" estadounidenses.
Irina Farion, diputada de Svoboda desde 2012 hasta 2014, declaró:
«Tenemos un solo camino: destruir Moscú. Vivimos para eso. Para eso vinimos al mundo. Para destruir Moscú, no sólo para destruir a los moscovitas en nuestras tierras, sino para acabar con ese hueco negro de la seguridad europea que debe ser borrado del mapa.»
El 24 de octubre de 2016, el entonces presidente de Ucrania, Petro Porochenko, modifica el emblema de los servicios secretos, que ahora incluye la frase "El sabio reinará sobre las estrellas" y muestra una lechuza sosteniendo una espada sobre Rusia.
Este artículo es continuación de los siguientes trabajos:
1. «Rusia quiere obligar Estados Unidos a respetar la Carta de la ONU», 4 de enero de 2022.
2. «Washington prosigue en Kazajastán el plan de la RAND Corporation, que ya continúa en Transnistria», 11 de enero de 2022.
3. «Washington se niega a escuchar a Rusia y a China», 18 de enero de 2022.
4. «La increíble sordera de Washington y Londres», 1º de febrero de 2022.
5. «Washington y Londres tratan de mantener su dominación sobre Europa», 8 de febrero de 2022.
6. «Dos interpretaciones sobre la cuestión de Ucrania», 16 de febrero de 2022.
7. «Washington hace sonar el clarín pero sus aliados retroceden», 22 de febrero de 2022.
8. «Vladimir Putin en guerra contra los “straussianos”», 5 de marzo de 2022.
9. «“Banda de drogadictos y de neonazis”», 6 de marzo de 2022.
10. «Estupor de Israel ante los neonazis ucranianos», 9 de marzo de 2022.
11. «Ucrania, otra gran manipulación», 22 de marzo de 2022.
12. «El Nuevo Orden Mundial que nos preparan con el pretexto de la guerra en Ucrania», 29 de marzo de 2022.
13. «Propaganda de guerra bajo una nueva forma», 5 de abril de 2022.
14. «La alianza entre el MI6, la CIA y los banderistas», 12 de abril de 2022.
15. «El fin de la dominación occidental», 19 de abril de 2022.
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LA CONTRAPROPAGANDA NUESTRA DE CADA DÍA:
ResponderEliminar“La guerra que vendrá, no es la primera.
Hubo otras guerras.
Al final de la última
hubo vencedores y vencidos.
Entre los vencidos,
el pueblo llano
pasaba hambre.
Entre los vencedores
el pueblo llano la pasaba también”.
(Bertolt Brecht)
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"Si no estáis prevenidos ante los medios de comunicación, os harán amar al opresor y odiar al oprimido".
(Malcolm X)
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«Canales ucranianos en Telegram hacen pasar las fotos con niños en Donbass de 2015 por menores escondidos actualmente en un sótano en Járkov»
“En realidad, las imágenes muestran a menores que se ocultaban en un refugio antibombas del fuego de las fuerzas ucranianas en la ciudad de Donetsk hace unos siete años…”
completo aquí:
https://actualidad-rt.com/actualidad/428225-canales-ucranianos-fotos-ninos-donbass-falsificacion
Salud y comunismo
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En todos estos bulos, lanzados a granel desde el bombardero mediático occidental, suele haber "NATO encerrado". Tiro por la culata, porque toda esta burda propaganda refleja más la desesperación de Wall Street que la supuesta maldad del eterno enemigo. Espero impaciente el próximo titular: "El asesinato de Kennedy fue orquestado por Putin".
EliminarEn fin, profundicemos, porque ya sabemos que eso que flota ingrávido en la superficie de las pantallas es marrón y huele muy mal, por más que intenten enmascararlo con "democráticos" perfumes "made in Langley".
Gracias por la aportación.
Salud y comunismo
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LAS GUERRAS IMPERIALISTAS Y LAS CONSECUENCIAS DE LAS CONSECUENCIAS
ResponderEliminarAlguien dijo aquello de que no hay que detenerse en los hechos, sino que siempre hay que ir más allá y pensar en las inmediatas consecuencias. Y añadió, mejor aún tener en cuenta también las consecuencias de las consecuencias. El que lo dijo no era marxista ni por asomo, pero en esta ocasión creo que razonaba de un modo en parte historicista y casi dialéctico al contextualizar los hechos en su proceso (si tienen un rato que perder, lean sobre ‘los contextos’ a la sabandija Alba Rico en ‘Público’), y no diagnosticarlo como ‘rayo caído de cielo sereno’ que dijo Marx o como ‘fenómeno atmosférico’ que dicen ahora de manera mucho más barata.
Leo en el ‘marxista’ Michael Roberts:
«Los regímenes occidentales buscan recortar la inversión en los sectores productivos y aumentar el gasto militar para luchar en la guerra contra Rusia (y luego China)»
O sea que el bueno de Roberts no encierra los hechos en compartimentos estancos sino los sitúa en sus concretos procesos históricos y, precisamente por ello, no olvida destacar ‘las consecuencias de las consecuencias’. De modo que señala las directas consecuencias del aumento del gasto militar que exige el Tío Sam (primer fabricante y exportador de armas del mundo: bisnes es bisnes) a sus lacayos occidentales (de la OTAN y alrededores), o sea la notable reducción de la inversión en los sectores productivos (que provocará el inmediato aumento del desempleo y, con la subsiguiente inflación, la consecuente pérdida de valor adquisitivo de los salarios) y lo que es más grave desde el punto de vista de las clases trabajadoras: la reducción drástica de la ya precaria financiación de los servicios y las políticas sociales… esto en los llamados ‘privilegiados países capitalistas desarrollados’, porque en lo que respecta a los menos afortunados:
«…las personas en Egipto, Túnez, Siria, Argelia y Marruecos gastan entre el 35 y el 55 por ciento de sus ingresos en alimentos. Viven al límite: pequeños aumentos de precios provocan pobreza y hambre.»
Claro que estamos hablando de las ‘personas’ no de los países ni de sus ‘mafiosas castas dirigentes’ (oligarcas si son rusos) que, ya sean armas o mascarillas, siempre ‘fabrican’ la oportunidad ‘criminal’ del lucrativo negocio ‘privado’.
Y para terminar, Roberts nos obsequia con una nota historicista:
«“Paz, tierra y pan” era el eslogan bolchevique, y el éxito tuvo mucho que ver con el pan y el control de las nuevas rutas de cereales dentro de Rusia. Ahora, el conflicto de Ucrania y las ilegales sanciones occidentales a Rusia pone en peligro la cosecha de estos dos principales exportadores de cereales.»
Salud y comunismo
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Un € menos en la cuenta del rico es imperceptible para éste, para el pobre supone comer o no comer. Claro que, como los países desarrollados (léase colonialistas) son los únicos que cuentan, el resto son, como suele decirse, "inevitables daños colaterales". Lo importante es que la campana de Wall Street repique ganancias sin cesar y las copas de champán de sus inversores tintineen festeras, porque ya se sabe, si los tiburones no se sacian los mercados sufren y los laboriosos pececillos sufren las consecuencias. Similar al ámbito jurídico, también en el económico todo el peso de la ley (¡pedazo de embudo!) cae implacable sobre los esquilmados, eufemísticamente conocidos como "menos favorecidos".
EliminarOtro tanto ocurre en el plano político de las relaciones internacionales. Antonio Guterres, de gira estelar por Ucrania, conmina a Vladimir Putin a que retire sus tropas de Ucrania ya que, "la guerra en el siglo XXI es un anacronismo intolerable". ¡Vaya! ¿Dónde estaba y dónde está el Secretario General de la ONU cuan de Libia, Irak, Siria, Colombia y Yemen se trata? En síntesis: ¡Qué asco!
Salud y comunismo
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En realidad ni siquiera contamos con el consuelo de “Un € o un dólar menos en la cuenta del rico”, ya que el recorte financiero en los sectores productivos lleva automáticamente aparejado, por parte del capitalista, la correspondiente reducción de mano obra, o sea el determinado ahorro en el coste salarial. De manera que, aún mermando la fuerza de trabajo, se haga posible el mantenimiento –o incluso aumento si el ganado aguanta– de la precedente relación productividad/rentabilidad (no digo volumen de producción), y en consecuencia se mantenga o crezca el margen de explotación, que mal llamamos beneficio. El caso es que las crisis capitalistas siempre son ‘convertibles’ en una gran oportunidad de negocio para los poderes oligárquicos: por un lado limpian de competencia e incompetentes su propio campo, el de los explotadores, y por otro, el muladar de los explotados, condenan a más amplios sectores de población ‘sobrante’ al desempleo vitalicio, la precariedad, la miseria o incluso el hambre. En medio la cada día más reaccionaria clase media ve cómo se vienen abajo sus sueños de ‘clase acomodada’ con los que habían comulgado con entusiasmo ‘cada domingo de misa o futbol’ antes de constatar su mierda de vida realmente existente: es decir el eterno ‘calvario de la decepción’. Calvario del que, por supuesto, la ideología dominante ya le ha señalado el culpable o los culpables: los rusos, los chinos, los negros, los rojos, los moros, los ateos, los que cobran el paro, los que quieren cobrar las horas extras y hacen huelgas, los yonquis que trafican para consumir, los sidosos que se lo tienen meresío por visiosos, las feminazis que no se dejan violar, … en fin, todos menos la exquisita oligarquía capitalista que les da por culo día sí y día también, y oye, te quieres creer que ni las gracias.
EliminarSalud y comunismo
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Gran post, no pasa desapercivido. Mañana lo publico yo. EEUU continuó la 2ºGM haciéndose cargo de los restos del imperio británico y del imperio alemán, con todo lo bueno y lo malo. Y como parte mala se hizo cargo del franquismno, salazarismo, fascismo y banderismo. Una estategia perdedora, porque fueron imperios basados en la sangre y el fuego; todo lo contrario de lo que marca la lógica militar y de dominio político.
ResponderEliminarSalud!