07 octubre, 2023

"Los arrogantes opresores supremacistas judíos humillados" — Norman Finkelstein

 



NORMAN FINKELSTEIN – 07/10/2023


Dolores Ibarruri, La Pasionaria, proclamó durante la Guerra Civil Española que: "Es mejor morir de pie que vivir para siempre de rodillas". Durante los últimos 20 años, el pueblo de Gaza, la mitad de los cuales son niños, ha permanecido encerrado en un campo de concentración. Hoy traspasaron los muros del campo. Si honramos la resistencia armada de John Brown a la esclavitud; si honramos a los judíos que se rebelaron en el gueto de Varsovia, entonces la coherencia moral exige que honremos la heroica resistencia en Gaza. Por mi parte, nunca veré ofensa (al contrario, me alegra cada fibra de mi alma) en las escenas de los niños sonrientes de Gaza, mientras sus arrogantes opresores supremacistas judíos han sido finalmente humillados.



Rehenes: aprendiendo de Israel


Ya han comenzado a brotar las lágrimas de cocodrilo por los rehenes israelíes tomados por militantes de Gaza. Pero Israel ha mantenido como rehenes durante casi 20 años a 2,1 millones de habitantes de Gaza, incluido un millón de niños, en una de las zonas más densamente pobladas del planeta. De hecho, Israel fue el único país del mundo que legalizó la toma de rehenes. El venerado presidente del Tribunal Superior israelí, Aharon Barak, sostuvo en 1997 que "una detención es legal si está diseñada para promover la seguridad del Estado, incluso si el peligro para la seguridad del Estado no emana de los propios detenidos", y que "la detención... a efectos de la liberación de... soldados capturados y desaparecidos, es de un interés vital para el Estado". (Esta decisión no fue revocada hasta el año 2000.) Si el pasado sirve de guía, los dirigentes de Gaza cambiarán a los israelíes por algunos de los 4, 500 palestinos retenidos en prisiones israelíes por supuestos "motivos de seguridad". Gaza sólo está siguiendo el libro escrito por Israel.


Todo este coro de calumnias, que el partido del orden, en sus orgías de sangre, no deja nunca de alzar contra sus víctimas, sólo demuestra que el burgués de nuestros días se considera el legítimo heredero del antiguo señor feudal, para quien todas las armas eran buenas contra los plebeyos, mientras que en manos de éstos toda arma constituía por sí sola un crimen.


Karl Marx, La Guerra Civil en Francia



No hay comentarios :

Publicar un comentario