Un triste mensaje de Aki Kaurismaki, tomado de una entrevista en un folleto del cineclub de Pontevedra, hablando de su película "El otro lado de la esperanza".
No sé si reproducirlo se considerará "apología de la violencia", o del terrorismo. Para mí es sólo una consatatación de lo que es evidente en el vídeo:
"Non vexo outra solución para saír deste pozo de miseria que matar esa minoría que posúe toda a riqueza do mundo. Hainos que exterminar, aos ricos e a os políticos que lles lamben o cu. Eles leváronnos a esta situación na que os valores humanitarios non valen nada. Se non o facemos, serán eles quen nos maten."
La defensa propia es parte esencial de una naturaleza sana. Toda esa monserga de poner la otra mejilla, perdonar al criminal y amarlo como a uno mismo, no es más que una taimada estrategia despóticamente urdida para domesticarnos y sojuzgarnos.
Efectivamente, no todas las violencias son iguales. Estoy, pues, de acuerdo con Aki Kaurismaki, siempre y cuando se extirpen de raíz las causas que posibilitan el arbitrario monopolio de la violencia. Lo cuál implica, obviamente, la desaparición de las clases sociales.
Permíteme que trascriba un magnífico poema de José Florencio Martínez
Y otra vez fue la historia a dar la vuelta al milenio pasando por los ríos de Babilonia. Allí fueron los carros del Faraón de nuevo a su rapiña. Y allí, tras la invasión, fueron saqueados museos, bibliotecas, templos, sitios que hicieron la Edad de Oro de anticuarios occidentales: ¿Qué fue de los libros de arcilla de Sippar? ¿Qué de la Biblioteca Nacional Iraquí? ¿Qué de Mosul, Nippur, Enil, Najaf, Kerbala? ¿Qué de las tablas asirias cuneiformes? ¿Qué de los manuscritos otomanos? El fuego, los expolios, los tornados de la historia escribiendo el palimpsesto, volviendo sin cesar a los Incipit.
Para la destrucción el hombre ha puesto todo su ingenio. Ha inventado máquinas de guerra terribles, artefactos, bombas y puñales. La barbarie no cesa y contemplamos la destrucción como un espectáculo. El género humano se degrada más en cada acto de barbarie. ¡Ah, dia que reviente todo! Salud Francesc Cornadó
Los tanques no arden con la misma facilidad que los libros, y sin embargo... "Una energía limitada se traduce en violencia. La energía suprema se muestra en la levedad". Chesterton.
Para construir hay que destruir primero. Pero hay gente que se lo ha tomado muy a pecho y se dedican todo el día a destruir usándolo de excusa. Para ellos no hay diferencia entre construir sus imperios sobre tierra quemada. Salud!
Debe ser duro vivir en un país que sabes que está condenado, que en cualquier momento pueden soltar sobre él a los perros de la guerra. La única esperanza implica la concienciación de la mayor parte del pueblo, incluso los que son de ideales contrarios ( o eso creen), por eso, la cosa está bastante chunga.
Pàra construir se puede rehabilitar, arreglar y dejar de consumir. Ahí la solución. Un abrazo y gracias, de nuevo. Un gran docucorto. Saludos desde el prelimbo...
Dicen que la energía no se destruye, sino que se transforma. De modo que, llamamos destrucción a una (mala) manera de transformar la energía. Sabiduría es transformar la energía en caricia, no en bofetada. Pero está claro que nos queda un laaaaaargo camino por recorrer. Feliz limbo.
Un triste mensaje de Aki Kaurismaki, tomado de una entrevista en un folleto del cineclub de Pontevedra, hablando de su película "El otro lado de la esperanza".
ResponderEliminarNo sé si reproducirlo se considerará "apología de la violencia", o del terrorismo. Para mí es sólo una consatatación de lo que es evidente en el vídeo:
"Non vexo outra solución para saír deste pozo de miseria que matar esa minoría que posúe toda a riqueza do mundo. Hainos que exterminar, aos ricos e a os políticos que lles lamben o cu. Eles leváronnos a esta situación na que os valores humanitarios non valen nada. Se non o facemos, serán eles quen nos maten."
¿Son iguales todas las violencias?
Entrecomillado irónico: ¿será verdad?
La defensa propia es parte esencial de una naturaleza sana. Toda esa monserga de poner la otra mejilla, perdonar al criminal y amarlo como a uno mismo, no es más que una taimada estrategia despóticamente urdida para domesticarnos y sojuzgarnos.
EliminarEfectivamente, no todas las violencias son iguales. Estoy, pues, de acuerdo con Aki Kaurismaki, siempre y cuando se extirpen de raíz las causas que posibilitan el arbitrario monopolio de la violencia. Lo cuál implica, obviamente, la desaparición de las clases sociales.
Permíteme que trascriba un magnífico poema de José Florencio Martínez
ResponderEliminarY otra vez fue la historia a dar la vuelta
al milenio pasando por los ríos
de Babilonia. Allí fueron los carros
del Faraón de nuevo a su rapiña.
Y allí, tras la invasión, fueron saqueados
museos, bibliotecas, templos, sitios
que hicieron la Edad de Oro de anticuarios
occidentales: ¿Qué fue de los libros
de arcilla de Sippar? ¿Qué de la Biblioteca
Nacional Iraquí? ¿Qué de Mosul,
Nippur, Enil, Najaf, Kerbala? ¿Qué
de las tablas asirias cuneiformes?
¿Qué de los manuscritos otomanos?
El fuego, los expolios, los tornados
de la historia escribiendo el palimpsesto,
volviendo sin cesar a los Incipit.
Un abrazo
Francesc Cornadó
Gracias por tan poética aportación, Francesc.
EliminarSalud!, y un abrazo.
Para la destrucción el hombre ha puesto todo su ingenio. Ha inventado máquinas de guerra terribles, artefactos, bombas y puñales. La barbarie no cesa y contemplamos la destrucción como un espectáculo. El género humano se degrada más en cada acto de barbarie. ¡Ah, dia que reviente todo!
ResponderEliminarSalud
Francesc Cornadó
Los tanques no arden con la misma facilidad que los libros, y sin embargo... "Una energía limitada se traduce en violencia. La energía suprema se muestra en la levedad". Chesterton.
EliminarSalud!
Para construir hay que destruir primero. Pero hay gente que se lo ha tomado muy a pecho y se dedican todo el día a destruir usándolo de excusa. Para ellos no hay diferencia entre construir sus imperios sobre tierra quemada.
ResponderEliminarSalud!
Yo diría que, para construir es preciso transformar, no necesariamente destruir. Aunque, claro está, esto no es posible en el sistema capitalista.
EliminarSalud!
Debe ser duro vivir en un país que sabes que está condenado, que en cualquier momento pueden soltar sobre él a los perros de la guerra.
ResponderEliminarLa única esperanza implica la concienciación de la mayor parte del pueblo, incluso los que son de ideales contrarios ( o eso creen), por eso, la cosa está bastante chunga.
Salud!
La historia ha demostrado que ese país puede ser cualquier país.
EliminarSalud!
Pàra construir se puede rehabilitar, arreglar y dejar de consumir.
ResponderEliminarAhí la solución.
Un abrazo y gracias, de nuevo. Un gran docucorto.
Saludos desde el prelimbo...
Dicen que la energía no se destruye, sino que se transforma.
EliminarDe modo que, llamamos destrucción a una (mala) manera de transformar la energía.
Sabiduría es transformar la energía en caricia, no en bofetada. Pero está claro que nos queda un laaaaaargo camino por recorrer.
Feliz limbo.